La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) responsabilizó a México por la violación sexual contra Ernestina Ascencio Rosario en el 2007. La institución tardó 18 años en llegar a un fallo por el caso contra la mujer indígena náhuatl monolingüe de 73 años.
A través de un comunicado sostuvo que el Estado de México violentó los derechos de la víctima, de su familia y de la comunidad. Sostuvo que en su lugar protegió a los victimarios, soldados que humillaron a la mujer.
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El crimen ocurrió durante el gobierno de Felipe Calderón, así como de Fidel Herrera Beltrán, exgobernador de Veracruz. Activistas denunciaron el crimen contra la mujer por parte del Ejército mexicano. No obstante las autoridades atribuyeron su fallecimiento por enfermedad.
El fallo de la CIDH por el caso de Ernestina Ascencio en México fue posible tras la reapertura del caso en 2022. En el caso hubo falta de atención médica y graves lesiones que condujeron al fallecimiento de la víctima.
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La Corte Interamericana de Derechos Humanos exigió a México a implementar distintas medidas de reparación, incluida una investigación penal exhaustiva y seria sobre la violación sexual y asesinato de Ascencio Rosario.
A su vez ordenó que se procese y sancione a los responsables; respecto a la familia, indicó que les debe dar tratamiento médico, psicológico y realizar un acto de reconocimiento de responsabilidad internacional.
